INJERTOS ÓSEOS

 

 

En este artículo les contamos todo lo que necesitan saber acerca de esta nueva posibilidad para regenerar y sanar los huesos.

 

 

¿QUÉ ES UN INJERTO ÓSEO?

Se le conoce como injerto óseo al proceso quirúrgico donde se reemplaza un hueso para reparar las fracturas óseas.

 

Normalmente el tipo de fracturas que se busca curar con este método es el que no tienen otra forma de tratarse. También se considera necesario aplicar un injerto óseo en caso de que la lesión o fractura presente un riesgo mortal para la vida del paciente.

 

 

¿CUÁL ES LA FINALIDAD DE LOS INJERTOS ÓSEOS?

Los injertos óseos se apoyan en la posibilidad de que el hueso humano es capaz de regenerarse completamente. Lo cierto es que este proceso de autoregeneración es lento y requiere de un espacio de fractura no muy amplio.

 

Por este motivo, los injertos de huesos actúan como reemplazo breve del hueso real. Una vez que el hueso original empieza a crecer y desarrollarse, este irá cubriendo lentamente la región donde se ubica el injerto hasta reemplazarlo por completo.

 

 

MECANISMOS DE LOS INJERTOS ÓSEOS

Existen tres mecanismos biológicos que hacen posible el proceso de injerto de hueso:

 

- Osteoconducción: es el proceso que ocurre cuando el injerto óseo sirve como reemplazo para el nuevo hueso que aún debe crecer.

Parte de este procedimiento son los osteoblastos (células capaces de sintetizar material óseo), los cuales utilizan el injerto como guía para expandirse y regenerar el hueso en el lugar indicado.

 

- Osteoinducción: involucra la estimulación de células que son capaces de convertirse en osteoblastos.

En la actualidad ya existen injertos óseos que pueden asimilar con facilidad tanto el proceso de osteoconducción como el de osteoinducción. Esto permite que el proceso de regeneración ósea sea más rápido y sencillo.

 

- Osteogénesis: el proceso de osteogénesis ocurre cuando los osteoblastos contribuyen tanto al crecimiento del hueso fracturado como a las zonas óseas existentes que quedaron dañadas.

En pocas palabras, la osteogénesis es capaz de alinear la estructura ósea para que el hueso se recupere de forma correcta.

 

 

HUESOS SINTÉTICOS Y ARTIFICIALES

Con los años, la tecnología de injertos óseos ha dado pasos agigantados. Una de las mejoras más destacadas es la de huesos sintéticos y artificiales.

 

Estos últimos son variantes interesantes puesto que pueden ser creados fácilmente por medio de materiales como el calcio, biovidrios y variantes de fosfato de calcio. El material sintético también se puede mezclar con componentes de un hueso natural para incrementar la actividad biológica en el organismo.

 

Aún se continúa estudiando la posibilidad de mejorar los adelantos sintéticos, y uno de los mayores desafíos es generar osteoblastos suficientes para que el hueso sintético pueda operar de forma natural en el cuerpo.

 

 

¿QUIÉNES PUEDEN OPERARSE PARA IMPLANTARSE INJERTOS SINTÉTICOS?

Toda persona que lo necesite realmente y que desee hacerlo. Como se ha mencionado, los pacientes más comunes de este tipo de cirugías son aquellos que padecen de fracturas o fisuras peligrosas para la salud.

 

Esta cirugía ya no es excesivamente cara en esta última década, lo importante es realizar una consulta previa con un especialista que tenga mucha experiencia.

 

IMPORTANTE

En muchos casos no es necesario realizar una cirugía de injerto de huesos. En Bien de Salud solo queremos mantenerlos informados sobre las nuevas posibilidades para mejorar nuestra salud. Pero su médico tratante y ustedes son quienes finalmente deciden lo más indicado para cada caso particular. Pero es importante que se mantengan bien informados y tomen las precauciones necesarias en caso de una cirugía.

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