¿QUÉ ES UNA CRISIS CURATIVA?

 

 

Una crisis curativa es una reacción aguda del organismo que resulta del dominio de las fuerzas de curación de la naturaleza sobre las enfermedades. Su tendencia se dirige hacia la recuperación y está, por lo tanto, de conformidad con los principios naturales.

 

La crisis curativa es un esfuerzo laborioso de cada uno de los órganos del cuerpo para eliminar productos de desecho y facilitar el camino hacia la regeneración. Esta crisis ocurre de acuerdo con la ley de curación de Hering que postula lo siguiente:

 

"La mejora y la curación se producen de dentro hacia afuera. Los síntomas desaparecen desde arriba hacia abajo. Las molestias van desde un órgano importante a otro menos importante. Los síntomas desaparecen en el orden inverso a su aparición".

 

Durante este proceso los tejidos viejos y dañados son reemplazados por tejidos nuevos y sanos. La crisis de la propia enfermedad, por el contrario, es desfavorable aunque también sea natural, y todos los órganos del cuerpo se rebelan contra ella en vez de colaborar, como en el caso de la crisis curativa. Cualquier evento que ocurra en el organismo, sea favorable o desfavorable, está controlado por leyes naturales. Una crisis curativa es muy similar a los estados críticos de la enfermedad, ya que se volverán a experimentar los síntomas del mal que aqueja al paciente, pero hay una diferencia muy importante: la eliminación. En la crisis curativa la eliminación es perfecta. La defecación es natural. Todos los órganos de eliminación cumplen con su función en forma normal. Por el contrario, en los estados críticos de la enfermedad, los procesos de eliminación se detienen o son insatisfactorios, lo que complica aún más el estado patológico del paciente. En la crisis curativa los procesos de eliminación se aceleran debido a la abundancia de energía vital recuperada. Todas las secreciones y otras formas de desechos acumulados en el organismo se disuelven y fluyen libremente, y así se establece un proceso de limpieza general y purificación.

 

Este proceso es lento, los tejidos no son reabsorbidos ni eliminados de manera inmediata, se logra poco a poco por medio de la mejora del sistema circulatorio y la regeneración sanguínea, pero puede tardar hasta algunos meses. La verdadera curación se logra cuando los tejidos viejos y enfermos se reemplazan completamente por otros nuevos y sanos.

 

Se conocen tres etapas por los que el paciente tiene que atravesar hasta llegar a su curación:

 

- Eliminación

- Transición

- Reconstrucción

 

Es importante conocer que la crisis curativa se manifiesta durante la etapa de transición.

 

El tiempo que dura la crisis curativa varía de paciente a paciente, pero por lo general es de unos tres días y se inicia con algún tipo de dolor o incomodidad, hasta que se haya alcanzado la completa expulsión de la raíz del problema. Muchas veces puede presentarse fiebre alta, pero luego los dolores disminuyen. Si la energía vital de paciente está disminuida, la crisis puede durar una semana o más. Cuanto más fuerte sea la persona, se sentirá más afectado por la crisis curativa.

 

¿Cómo provocar una crisis curativa? Aunque hay muchas maneras de hacerlo, el ayuno es la vía más rápida por la cual se logra que aparezca; sin embargo, el ayuno no es suficiente para lograr una curación completa de la enfermedad. Después del ayuno, es necesario acudir a un médico naturista para que le brinde al paciente el tratamiento a seguir para que el organismo pueda continuar con su proceso de sanación; además también le dará las pautas necesarias para cambiar o modificar sus hábitos de vida.

 

Es importante resaltar que cuando la crisis curativa está en desarrollo, también se origina una etapa aguda de lo que ha ocurrido durante el curso de la enfermedad. Mientras se va eliminado el problema, los síntomas se van esbozando paso a paso, pero en sentido inverso como dice la ley de Hering.

 

Para sanar, el paciente necesita pasar por la crisis. Hay que esperarla, estar pendiente de ella y promoverla. La crisis hace revivir al paciente las enfermedades o males que ha ido viviendo a lo largo de su vida, aunque no las recuerde, ya que el organismo no olvida y recorre en sentido inverso los males acumulados. Son muchísimas las experiencias clínicas que demuestran que el revivir las dolencias del pasado ayuda a lograr la curación total.

 

Toda evolución que desarrolla el cuerpo para recuperar la salud en sus órganos afectados por estados degenerativos entra dentro de lo que llamamos “crisis curativa”

 

 

Fuentes de consulta

saludbio.com

Enciclopedia de Medicina Natural Dr. J. Sagrera Ferrándiz

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