EL PODER DEL BIENESTAR RESIDE EN NUESTRO INTERIOR

 

Alcanzar y mantener un equilibrio y bienestar emocional, es esencial para atravesar el recorrido de nuestra existencia humana en este hermoso y complicado mundo; pero se hace aún más necesario e inminente poner en práctica todo aquello que nos permita consolidar ese balance y armonía personal, para poder afrontar actualmente la época de pandemia mundial que juntos hemos tenido que atravesar en este último período. 

 

La vida humana a veces resulta complicada, pues con algunas de las experiencias que atravesamos desde que nacemos, podemos sufrir heridas emocionales, miedos, pérdidas, dolor, u otras vivencias que nos pueden hacer olvidar nuestra esencia de seres espirituales, así como olvidar el poder que traemos en nosotros mismos. 

 

Asimismo, la educación y creencias que nos han sido inculcadas desde pequeños, no siempre han estado enfocadas en enseñarnos que tenemos dentro de nosotros mismos, el poder para lograr nuestro bienestar y felicidad, así como para lograr todo lo que soñamos en la vida. 

 

Por ello, aunque a veces lo olvidemos, debemos recordar que somos un pedazo del Dios creador; estamos hechos a su imagen y semejanza, y por ende, parte de su luz y poder, reside en nuestro interior, y para conectarnos con esa energía de la creación, solo tenemos que conectarnos con nuestro ser interno. Cuando logramos la conexión espiritual con nuestra esencia creadora interna, y lo correlacionamos con pensamientos y emociones positivas, seremos cocreadores del mayor bienestar posible para nuestras vidas. 

 

Aunque parezca un trabajo difícil de lograr, no lo es, pues con voluntad, constancia y determinación, podemos llevar a cabo día a día, pequeñas pero conscientes acciones que nos llevarán a lograr esa conexión interna creadora de bienestar.

 

Acciones para conectar con nuestro poder interno

Cada mañana, al levantarnos, podemos proponernos realizar algunas acciones durante el día, que nos llevarán a reconectarnos con nuestro natural poder creador, el cual nos ayudará no solo a alcanzar el bienestar y la confianza necesarios para afrontar cualquier circunstancia de la vida, por muy adversa que sea, sino que también nos ayudará a manifestar todas las bendiciones que por ley natural y divina nos corresponden.

 

- Respira conscientemente.

- Sonríete a ti mismo, a los que te rodean y a la vida. Aunque a veces nos cueste sonreír y debamos hacer un esfuerzo, nuestro cerebro interpretará que estamos alegres. La alegría, sube nuestra frecuencia vibratoria, lo cual es esencial para conectar con nuestro poder interno.

- Busca esa alegría y felicidad en ti mismo. La felicidad, solo debe depender de nosotros mismos, pues se trata de una elección, y como consecuencia, no debe estar sujeta o condicionada a circunstancias externas.

- No enfoques tu atención en aquello que careces. 

- Siente gratitud. Enfoca tu atención en aquello que sí tienes, disfrútalo y siente agradecimiento interno por la vida y por cada bendición que gozas.

- Practica la meditación hacia tu ser interior.

- No prestes atención al ruido mental y externo.

- Vive en el aquí y el ahora y no enfoques tu atención en el pasado o en el futuro. Vivir con la consciencia en el tiempo presente, nos conecta con nuestro ser interior. 

- Escucha tu voz interna, tu intuición. Ella siempre está allí, dispuesta a ayudarnos, pero no siempre la escuchamos porque estamos distraídos en el ruido externo. 

- Descubre el potencial de amor dentro de tu corazón, y hazlo crecer cada día más. Ámate, ama y cuida a todos los seres que te rodean, pues, cada uno, es una chispa del Dios creador.

- Mantén pensamientos positivos. Si se cuela algún pensamiento negativo o trágico, cancélalo inmediatamente y enfócate nuevamente en el buen pensar. Cada pensamiento crea una realidad, aunque no la veamos con los ojos. Debemos ser observadores conscientes de cada pensamiento, porque serán el reflejo de la realidad que crearemos.

- Mantén alejado al ego. No te juzgues ni juzgues a tu prójimo. Todos somos humanos y estamos aprendiendo en el transitar de la vida, cada quien desde la evolución en la que se encuentra.

- Sé bondadoso y has el bien en cada oportunidad que tengas. Ayudar, siempre es una oportunidad para nuestro crecimiento y evolución espiritual.

- Acepta las circunstancias de la vida que no se pueden cambiar y suéltalas. Querer cambiar las cosas que suceden genera ansiedad, preocupación y estrés. Aceptar y soltar, evita que nos distraigamos. 

- Toma suficiente agua y aliméntate saludablemente. No necesitas dañar a otro ser vivo para tener una dieta sana y balanceada.

- No le des tanta importancia a las cosas materiales. Sentir apegos materiales y ansiedad por tener más cosas, solo genera una energía de carencia que nos alejará de nuestro centro interno. En cambio, cuando restamos importancia y nos desapegamos de las cosas materiales, vibramos en energía de abundancia con el universo, y éstas llegarán solas y en el orden perfecto y abundante, de acuerdo a nuestras necesidades, para proporcionarnos bienestar.

- Si crees que no lo lograste, vuelve a empezar cada día. Recuerda que somos seres humanos, y por ello, no debemos juzgarnos a nosotros mismos si creemos que no lo hemos hecho bien o si creemos que nos hemos equivocado. Ese sistema de creencias nos ha sido inculcado incluso de manera inconsciente, y nos hace sentir culpables. Seamos benevolentes con nosotros mismos;  levantémonos cada día e intentémoslo de nuevo. 

 

Fuentes de información:

blog.elartedesabervivir.com

cristinapousa.com

 

16/06/2021