VER LO ESENCIAL

“Aprende a mirar lo que ya miraste y trata de ver lo que no viste”

Saturnino de la Torre

Dicen que algo existe solo cuando le prestamos atención. Para hacerlo, nuestros sentidos deben posarse sobre aquello que es digno de atención. Pueden ser los ojos, los oídos, nuestro olfato o todos juntos.

Algunas veces solo vemos, pero no miramos; oímos pero no escuchamos. 

Hay que aprender a hacerlo, como decía un viejo amigo, entre líneas, es decir, mirar más allá de lo que estamos viendo, escuchar más allá de lo que estamos oyendo.

Que nuestra atención se pose en el objeto que nos llama y capte más allá de lo superficial, lo que nos quiere decir con palabras, con imágenes o con ambas.

Atención y con-centración; estos actos marcan una gran diferencia para estos fines.

En toda esa información que recibimos debemos saber distinguir que parte es el relleno  y cuál otra la esencia, el meollo, la sustancia del asunto. Hay que aprender a separar la hojarasca de la fruta. Hay que aprender a mirar, observar y no solo ver. Hay que aprender a escuchar con todo nuestro ser y no solo oír. En fin, ir un poco más a la esencia que solo a la superficie.

Esta cultura epidérmica ha dañado nuestra profundidad hasta en estos actos tan sencillos y cotidianos.

¡Ya es tiempo de retomar lo esencial alma mía!

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10/05/2021